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‘El Invitado’: Da dos alegrías, cuando llega y cuando se va

El Invitado Interior

Frost es un peligroso espía renegado de la CIA que se ve obligado a entrar en acción tras diez años desaparecido. Matt es un agente novato encargado de un piso franco al que Frost accede arrestado ocultando información providencial. Cuando unos mercenarios atacan el piso franco ambos se verán obligados a entenderse e intentar sobrevivir para averiguar quién quiere acabar con ellos.

Con un aspecto visual copiado directamente de la saga de Jason Bourne, llega a nuestras pantallas ‘El Invitado’ que se basa en el carisma de su actor principal, Denzel Washington, para tirar de casta y ofrecer un espectáculo loable. Si algo tiene el amigo Denzel Washington es, que ya sea un film dispuesto a simplemente entretener o un producto en el que tenga que lucirse, el amigo Denzel siempre cumple. Siempre da la sensación de que está haciendo algo, siempre aparece metido en la historia y muchos de sus compañeros deberían aprender de él.

Daniel Espinosa dirige con brío y buen montaje una historia con algún que otro agujero de guión, problema que se ve al final de la cinta cuando todo debe solucionarse y el final indicado podría haber dado más juego, pero acaba en lo más habitual: el malo se descubre, hay tiroteo final con fuego de por medio… es una pena, porque el espectáculo inicial, ese que te mantiene en tensión durante una hora de película es magnífico.

Su primera parte es sensacional. El momento de la huída de los dos personajes, cuando empezamos a descubrir de qué va el personaje interpretado por Denzel, es la mejor fase del film.

El señor Reynolds, de tendencia inconstante (le mataría por ‘El Cambiazo’ o ‘Linterna Verde’, le adoro por ‘Enterrado’ o ‘Ases Calientes’) creo que se desenvuelve mejor teniendo una estrella de por medio que le quite planos. Está verde para encabezar proyectos de éste calibre pero está más suelto si hay una estrella que lleve el peso de la acción. Es un problema que, a lo mejor, no tiene Jeremy Reener, pero Reynolds está bien, está dinámico y notamos el cambio de ser un piltrafilla encerrado en un piso, a acabar siendo una máquina de matar.

‘El Invitado’ funciona. No se complica y se digiere bien. Es una pena que al final todo se atropelle y nos quedemos con ganas de saber más, o de una resolución más imaginativa.

Lo Mejor: La huída del piso franco de los dos personajes.

Lo Peor: Su típico final.

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