La primera guerra mundial asoló Europa. Casi todos los artistas y cineastas quedaron marcados por el conflicto. Tras la guerra se da el periodo entreguerras y emergen algunos movimientos cinematográficos como el Realismo francés. Nos referimos a un cine muy concreto encuadrado entre la década de los treinta y la Segunda Guerra Mundial.
Los métodos de historia del cine tienden a encasillarlo todo y como movimiento, se conoce como Realismo poético pero más bien, nos encontramos ante una serie de cineastas con rasgos estéticos y preocupaciones en común. Estos puntos de vista sobre los que reflexionan, los plasmarán en el celuloide. Encontramos nombres como René Clair, Jean Renoir, Jean Vigo, Marcel Carné, Pierre Chenal, Jacques Feyder, Marc Allégret, Jacques Becker, Jean Grémillon y Julien Duvivier.
Como cine de vanguardia posterior a la guerra, bebe de otras corrientes cinematográficas anteriores Parte del tratamiento de los escenarios del Expresionismo alemán. En filmes como ‘Metrópolis’ nos introducíamos en ambientes cosmopolitas marcados por la teatralidad que se consigue por el juego de la luz y el contraluz. De nuevo, vemos la ciudad como uno de los escenarios principales y se pone en marcha el uso de este elemento para acentuar su teatralidad. La diferencia es que ahora son luces tenues que crean ambientes vaporosos y brumosos. El escenario principal es la ciudad y con ello, los protagonistas más importantes, son sus habitantes. No hablamos de personajes distinguidos ni adinerados, sino que el Realismo retrata con mucho dramatismo a ciertos sectores como la clase trabajadora e incluso de algunos de los aspectos más marginales de la sociedad como las prostitución…, un buen ejemplo visual sería la cinta ‘Los bajos fondos’. Como podréis observar los personajes no son los héroes de del cine de Hollywood.
En definitiva, es un cine que expresa el ambiente Europa, un continente asolado por la guerra.
Comentarios
Post relacionados
